Cómo Aprender A Escuchar La Voz De Dios - 7 Métodos Para Lograrlo.

En un mundo de tinieblas, como en el que permanecemos, de incertidumbre, temor y donde escuchamos diferentes voces, es trascendental que todo creyente, ministro y líder, aprenda a escuchar la voz de Dios. Se han visto manifestaciones de incredulidad, con relación a este tema, un ejemplo de esto es, que permanecen personas que no creen que Dios hable hoy.

Sencillamente, creen que es un Dios que habló en algún tiempo, pero que ahora está en silencio. Sin embargo, mediante la lectura de la Biblia, logramos ver que Dios siempre ha anhelado hablar y comunicarse con su pueblo.

 La voz de Dios en el presente

Algunas personas tienen ideas y estándares del pasado que los han hecho creer que Dios no habla hoy a su pueblo. La palabra de Dios nos enseña que él habló ayer, habla hoy y seguirá hablando. Su deseo es comunicarse con el pueblo.

“Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en  estos últimos días nos ha hablado por el hijo, a quien constituyó heredero de todo y por quien asimismo hizo el universo". Hebreos 1.1, 2

Quienes escucharon la voz de Dios en la biblia

Dios siempre ha querido hablarle a su pueblo, tanto en el pasado como en el presente. Él es un Dios vivo y soberano. Tenemos que sustituir nuestra mentalidad vieja, que dice que Dios habló en el pasado y solamente a ciertas personas.

1.- En el antiguo testamento la voz de Dios fue escuchada por los apóstoles y profetas:

• Dios habló a Moisés, Dios nos enseña en la biblia que habló a Moisés cara a cara sin  intermediarios. Moisés escucho la voz de Dios.

-Respondió Dios a Moisés: “Yo soy el que soy y añadió: Así dirás a los hijos de Israel: Yo Soy me envió a vosotros ". Éxodo 3.14

• Dios habló a Samuel, en el caso, de Samuel vemos cómo Dios le habló en voz audible, y él respondió de manera obediente.

"Vino Jehová, se paró, y llamó como las otras veces: ¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel dijo: Habla, que tu siervo escucha". 1 Samuel 3.10

2.-En el nuevo testamento la voz de Dios fue escuchada por los apóstoles y profetas:

• Dios habló al apóstol Pablo; En aquel tiempo el apóstol Pablo perseguía, y hostigaba a la iglesia e iba para capturar y matar a los creyentes, el señor se le apareció y mostró en visión y le habló a Pablo.

“ Pero, yendo por el camino, aconteció que, al llegar cerca de Damasco, repentinamente lo rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?" Hechas 9.3, 4

• Dios habló al apóstol Juan; él estaba preso en la isla de Patmos, pero estaba buscando al Señor con todo su ser y su corazón. Vemos cómo Dios le habló y le dio el libro de Apocalipsis.

"Estando yo en el Espíritu en el día del Señor oí detrás de mí una gran voz, como de trompeta..." Apocalipsis 1.10

¿Por qué Dios quiere hablarnos?

 Dios desea revelar sus planes y propósitos para nuestra vida, la comunicación es parte de su ser. La tendencia de Dios es hablar con su creación. Él anuncia sus deseos, planes, el presente y el futuro, porque es parte intrínseca y natural de su ser.

La biblia nos habla lo siguiente: "...si oyes hoy su voz...", nos está hablando en tiempo presente y Dios habita en el eterno presente; por eso, su nombre es "El gran yo soy". Dios es hoy, es decir, habla hoy y sana hoy.

Si estamos decididos a obedecerle, podemos escuchar su voz. En ocasiones, nuestro oído espiritual está bloqueado, y no sabemos oír al señor cuando nos habla. La palabra de Dios nos enseña que él es espíritu y, por lo tanto, una condición elemental para poder oírlo es vivir en el espíritu.

 ¿Cuáles son los ejercicios espirituales que se deben practicar para oír la voz de Dios?

• El ayuno y la oración. El ayuno genera gran receptividad en nuestro espíritu y esto nos hace sensibles para oír la voz de Dios.
• El orar constantemente en el espíritu. Cuando oramos en lenguas, nuestro espíritu se estimula y se desarrolla. Procure orar una hora en lenguas o en el espíritu todos los días, y después de algún tiempo, algo le sucederá a su espíritu; se volverá sensible a la voz de Dios.
• Profundizar, estudiar la palabra de Dios, el escudriñar la palabra crea sensibilidad a la voz de Dios. Cuando estudias, el señor comienza a mostrarte sus misterios y tesoros ocultos. Tome un versículo de la biblia diariamente y medítelo, háblelo, susúrrelo para sí mismo y empezará a ver consecuencias extraordinarias.

  Infórmate más sobre el tema aquí: Los Dones Espirituales: Cuales Son Y Como Activarlos En Tu Vida.

¿Cuál es la clave esencial para oír la voz de Dios?

Estar dispuesto a obedecer, uno de los motivos por las cuales Dios deja de hablarles a muchos creyentes, es porque no están aprestados a obedecer.

“Muchos dicen Dios a mí no me habla". Si éste es su caso, antes de decir esto, pregúntese cuándo fue la última vez que el señor le habló y usted no hizo lo que él le pidió. Cuando la identifique, debe rectificar, pida perdón a Dios, y verá que nuevamente vuelve a confiar y  le volverá a hablar. Cuando somos obedientes, estamos prestos a oír la voz de Dios.

La palabra obediencia implica dos cosas en el griego: "akouo" significa oír para obedecer, y "bupakouo ", que significa instar, escuchar, oír para hacer. En esencia, obediencia es oír con oídos espirituales y poner por obra lo que Dios nos ordena hacer.

En oportunidades, Dios nos pedirá hacer cosas que van en contra de nuestro razonamiento humano, que no serán fáciles de hacer, pero debemos estar dispuestos a obedecer, a pesar del lugar, los escenarios  o las personas.

Infórmate más sobre el tema aquí:  8 Claves Para Entrar En La Puerta De La Obediencia A Dios

Medios por los cuales Dios se revela y se comunica con su pueblo.

• El oír

Cuando se habla de oír, no es un oír físico, sino espiritual. Nuestro espíritu tiene un oído espiritual, al igual que nuestro cuerpo tiene un oído físico, y es el medio principal por el cual el señor nos habla.

“Cuando Elías lo oyó, se cubrió el rostro con el manto, salió y se puso a la puerta de la cueva. Entonces, le llegó una voz que le decía: —Qué haces aquí, Elías?" 1 Reyes 19.13

• El ver

Cuando se habla de ver en el espíritu, es cuando el señor nos deja ver el mundo espiritual, y cuando esto ocurre, podemos ver imágenes mentales, visiones y sueños.

"Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: ¡Aquí está un verdadero israelita en quien no hay engaño! Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Jesús le respondió: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi". Juan 1.47, 48

• El sentir

El sentir es una percepción interior, una intuición del espíritu santo dentro de nuestro ser; es un saber interior que no tiene nada que ver con un sentir físico o carnal, sino que es un testimonio interior, un sentir en nuestro espíritu.

  Métodos que Dios utiliza para hablarnos.

1.-El testimonio interior

¿Qué es el testimonio interior?

Es un estremecimiento en lo profundo de nuestro espíritu, una intuición interior, un saber, una percepción, es un sentir y un impulso en nuestro espíritu.

En el espíritu, existe algo llamado intuición, por medio el cual percibimos y conocemos las formas espirituales. El testimonio interior no es una voz, sino un sentir.

Sin embargo, el comprender las cosas espirituales es obra de la mente. Así como el alma tiene sentimientos emocionales, el espíritu tiene sentimientos espirituales.  El testimonio interior es el método más usual, usado por Dios para hablar a su pueblo.

2.-La voz del espíritu santo

Dios habla a través de la voz del espíritu santo. La mayor parte de las veces que el espíritu santo habla a nuestra vida, es porque desea anunciar algo de enorme importancia. Puede ser algo que tenga que ver con nuestro llamado, que sea de vida o muerte para nosotros, o que pueda afectar positiva o negativamente a diversas personas.

Además, puede ser algo que cambie el curso de un ministerio o una visión. Dios se asegura que oigamos concisamente la voz del espíritu santo.

¿Cómo es la voz del Espíritu Santo?

Es una voz tierna y  suave, pero al mismo tiempo, con gran autoridad. En oportunidades, resulta ser como si alguien nos estuviera hablando con voz audible, fuertemente. El espíritu santo no nos habla en todo momento de manera directa.

3.-Los profetas

El ministerio del profeta está activo hoy día, este ministerio es dado por el señor Jesucristo para edificar a su pueblo. Dios tuvo profetas en el antiguo y en el nuevo testamento, como en aquel tiempo los tiene actualmente, porque Dios sigue hablando a través de sus profetas.

• Dios habló  en aquel tiempo por medio del profeta a Naamán.

"Entonces Elíseo le envió un mensajero a decirle: "Ve y lávate siete veces en el Jordán; tu carne se restaurará y serás limpio". 2 Reyes 5.10

• Dios habló a Pablo.

"Mientras nosotros permanecíamos allí algunos días, descendió de Judea un Profeta llamado Agabo, "quien; viniendo a vernos, tomó el cinto de Pablo, se ató los pies y las manos y dio: Esto dice el Espíritu Santo:

"Así atarán los judíos en Jerusalén al hombre de quien es este cinto, y lo entregarán en manos de los gentiles". Hechos 21.10, 11

¿Qué es un profeta?

Es una extensión importante del ministerio de Jesús y uno de los cinco ministerios del gobierno de Dios.  El profeta; es uno que habla en el nombre de Dios, ya sea en el presente, en pasado o en futuro. Es aquel que habla impulsado por la inspiración del Espíritu Santo.

4.-La profecía

Otro método por medio de los cuales Dios  habla, es la profecía. La profecía es un don del espíritu santo, y su propósito es edificar el cuerpo de cristo. Así como Dios usa profetas para hablarnos, también usa la profecía.

No dejes de leer el siguiente articulo: Que Es El Trono De Dios Y Como Se Manifiesta En Nosotros.

¿Qué es la profecía?

Es la palabra hebrea "naba", que significa fluir hacia adelante, burbujear como una fuente, manifestar una cosa que solo puede ser  conocida por única revelación divina.

¿Cuál es la definición bíblica de profecía?

Es un don del espíritu santo dado al creyente para hablar una palabra intervenida por Dios. Tiene como propósito, consolar, exhortar  y edificar al cuerpo de Jesús.

¿Cuál es la diferencia entre el oficio del profeta y el don de profecía?

El oficio del profeta es uno de los cinco dones ministeriales que hacen parte importante y fundamental del gobierno de la iglesia.

El ministerio del profeta no es un don del espíritu santo, sino una extensión de Jesús como profeta. Jesús es la manifestación completa de los cinco oficios o dones ministeriales del  espíritu santo.

"Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros... “Efesios 4.11

Teniendo en cuenta  que la profecía es un don del espíritu santo dado al individuo. El profeta es un don ministerial, un oficio, gestión, misión, dado al cuerpo.

¿Cuál es el propósito de la profecía en el nuevo testamento?

Ánimo. Cuando se le da una palabra profética a alguien, recibe aliento, ánimo y motivación para continuar  adelante y, al mismo tiempo, es un llamado a tener un  acercamiento  a Dios.

• Consolación. La palabra consuelo representa el recibir alivio en medio de las pruebas o la dificultad. La palabra profética sirve para levantar, fortalecer y consolar cuando una persona está pasando por problemas y dificultades. Dios habla hoy, y uno de los métodos que él usa es la profecía.

“Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. 'El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetisa, edifica a la iglesia". 1 Corintios 143, 4

• Edificación. Textualmente, la palabra edificación significa levantar. Esto va más allá de hablar en lenguas, que simplemente nos edifica a nosotros mismos. La palabra profética levanta, eleva el espíritu, el ánimo y la actitud de una persona. Al mismo tiempo, tiene el propósito de fortalecer al pueblo cuando está caído, cansado, rendido, desfallecido y desanimado.
• Exhortación. En el idioma griego, la palabra exhortar personifica un llamado, un acercamiento; igualmente, significa aliento y el don de profecía permanece vigente hoy. Para activarlo, exclusivamente tenemos que creer y actuar en él.                                                   

5.-La palabra de Dios o las escrituras

“Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre y no abandones la enseñanza de tu madre.  Átalos siempre a tu corazón, enlázalos a tu cuello. Te guiarán cuando camines, te guardarán cuando duermas y hablarán contigo cuando despiertes". Proverbios 6.20-22

Dios habla a las personas de diversas formas por medio de las escrituras. A veces, un verso bíblico que viene al corazón de una persona, es cabalmente la respuesta que requerías. Otras veces, habrá alguien que se  acerque y te dé  una palabra de la escritura, que es la respuesta debida de Dios a la necesidad.

6.-Los sueños

Dios ha usado los sueños en el pasado y aún los usa en el presente para manifestar su revelación al pueblo. Dios ha participado cosas importantes para su reino

¿Qué son los sueños?

El diccionario Webster define sueño como una continuación de imágenes o ideas presentes en la mente mientras dormimos Los sueños son formados en el subconsciente del hombre, dependiendo del trasfondo, experiencias o escenarios de la vida. Así vienen las imágenes y los símbolos, los cuales son personales para cada individuo.

Los sueños se constituyen estrictamente en la mente natural o pueden ser dados como imágenes de Dios, del espíritu santo, y ser recibidos dentro de la mente del hombre.

No siempre son fáciles de concebir, pero los sueños son un método por medio del cual Dios habla. Por ejemplo, cuando Dios le habló a José en sueños.

“Tuvo José un sueño y lo contó a sus hermanos, y ellos llegaron a aborrecerlo más todavía". Génesis 37.5

7.-Visiones

El diccionario Webster explica visión como el acto o el poder de ver entidades abstractas o invisibles. Existen otras palabras griegas y hebreas para describir lo que es una visión, y una de esas palabras es la revelación.

Cuando Dios nos permite ver el mundo espiritual, recibimos una revelación de Dios. Es como si estuviéramos viendo las imágenes en una pantalla de televisión a color.

Los sueños y las visiones son la evidencia y convicción de que el espíritu santo está en operación, y además, son una señal del derramamiento del espíritu santo en el tiempo actual.

“Pero esto es lo dicho por el profeta Joel: "En los postreros días, dice Dios, derramaré de mi espíritu sobre toda carne, y vuestros hijos y vuestras has profetizarán; vuestros jóvenes verán visiones y vuestros ancianos soñarán sueños..." Hechos 2.16, 17

Existen tres tipos de visiones:

• Visión espiritual. Es cuando una persona puede ver en el mundo espiritual, como lo fue en el caso de Pablo en su camino hacia Damasco. Pablo dice que cuando la visión ocurrió, sus ojos fueron cegados y no podía ver físicamente, pero sí podía ver en el espíritu. Dios habló a Ananias por medio de una visión para que estuviese orarando por Pablo.

“Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananias, a quien el Señor dio en visión: Ananias. El respondió: Heme aquí, Señor". Hechos 9.10

• Éxtasis. Es el tipo de visión donde los sentidos físicos permanecen en suspenso durante un momento. Esta es la segunda clase de visión más alta que un creyente puede experimentar. No está consciente del lugar donde está, ni de todo lo que tiene contacto con el mundo físico. No es que quede inconsciente, sino que resulta más consciente de las cosas espirituales que de las físicas. Por ejemplo, Pablo fue a Jerusalén por primera vez y él dijo:

"Y me aconteció que vuelto a Jerusalén en el templo me sobrevino un éxtasis". Volví a Jerusalén, y mientras estaba orando en el templo me sobrevino un éxtasis. Vi al Señor, que me decía: `Date prisa y sal prontamente de Jerusalén, porque no recibirán tu testimonio acerca de mi". Hechos 22.17, 18

• Visión consciente. Éste es el tipo de visión en el cual los sentidos no están en suspenso y la persona tiene los ojos físicos abiertos. Este es el nivel más alto de visión. La persona está consciente de todo, pero al mismo tiempo, puede ver el mundo espiritual. Los profetas del antiguo testamento eran llamados videntes y tenían este tipo de visiones continuamente.

“Antiguamente en Israel cualquiera que iba a consultar a Dios, decía: "Venid y vamos al vidente"; porque al que hoy se llama profeta, entonces se le llamaba vidente". 1 Samuel 9.9

En el Antiguo testamento, Dios hablaba directa-mente a los profetas, reyes y sacerdotes, pero el pueblo tenía que ir a preguntar al profeta para encontrar una respuesta de Dios. En el Nuevo Testamento, Dios resucita nuestro espíritu y ahora podemos oírlo directamente. No significa que Dios no nos puede hablar a través de un profeta; sí, él lo  puede hacer, pero  también puede hablar claramente a nuestro espíritu.

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