El Espíritu Santo: "EL Administrador De Los Recursos Del Reino"

El Espíritu Santo deriva del latín Espíritus Sanctus que se refiere a la gracia divina que se manifiesta para entrar en relación con los creyentes con el fin de unirse con Cristo o con Dios, en otras palabras, el Espíritu Santo es el que activa la fe cristiana.

El espíritu santo:

El Espíritu Santo es una de las tres personas de Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Para muchos  este es un conocimiento difícil de concebir. La Biblia revela que existe sólo un Dios viviente; aún así aprendemos de las Escrituras que Él está compuesto de tres personas diferentes. Una manera de visualizar parcialmente este concepto es examinar la naturaleza del agua (H2O). El agua es un compuesto único que puede existir en tres estados - líquido, hielo, y vapor. Otro aspecto es la de un huevo. Está compuesto de la clara, la yema, y la cáscara, pero sigue siendo un huevo. Por supuesto, de ninguna manera estos ejemplos dan un perfil completo de nuestro Dios, pero ilustran el hecho de que sus tres "personas" de ninguna forma anulan su unicidad.

El Espíritu Santo no es una fuerza intangible de vida, divaga. Él no es indefinido o sin pensamiento. El espíritu santo es una "persona" igual en todos los aspectos a Dios, el padre, y a Dios, el hijo. La Biblia nos dice que todas las características de Dios, evidentes en el padre y en el hijo, son igualmente evidentes en el espíritu santo. 

El Espíritu Santo está acicalado de entendimiento, emociones, y voluntad. En:(1ra a Corintios 2:11), vemos una muestra del entendimiento y de la voluntad del Espíritu Santo. "Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? En el versículo se muestra que el espíritu santo era, es, y esta así como al conocimiento de todas las cosas del Reino “Así  tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios." 

Sin embargo aunque el Espíritu Santo tiene todas las características de Dios, Él tiene actuaciones y funciones específicas en nuestras vidas. En Juan 16:13, vemos al Espíritu de Verdad como nuestra guía: "Pero cuando venga el Espíritu de Verdad, Él os guiará a toda la verdad: porque no hablará por Su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir." 
En Juan 14:26, profundizamos que el Espíritu Santo es nuestro Consejero y maestro: "Más el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en Mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que Yo os he dicho."

En las escrituras en, (1ra Corintios 3:16), comprendemos que el Espíritu Santo vive dentro de nosotros: "¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?" Una vez que se es recibe al señor Jesús en el corazón, El espíritu santo comienza a morar en nuestras vidas: En Hechos 1:8, conocemos de dónde viene nuestro poder: "Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo." En Romanos 8:14, conocemos de dónde viene nuestra dirección: "Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios." El espíritu Santo es el guía, y todo aquel que deja que guié sus caminos, y sea obediente a las ordenanzas este es reconocido como hijo de Dios.

En Romanos 8:26, evidenciamos que el Espíritu Santo está con nosotros en momentos de debilidad y de oración: "Y de igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles." En Hebreos 9:14, notamos que el Espíritu Santo es eterno. En 1ra de Corintios 2:11, vemos que el Espíritu Santo todo lo sabe. En el Salmo 139, conocemos que el Espíritu Santo está en todas partes.

El Espíritu Santo se encarga de los recursos del Reino:

Son tres las Personas de la Trinidad. Aunque las tres Personas son Una sola, ellas nunca se confunden en cuanto a su función. El Padre es de Quien debemos llevar a cabo su voluntad en el Reino de Dios. El Señor Jesús es el Verbo, la Palabra del Padre, la Expresión de la Persona del Padre. Él Espíritu Santo es la sabiduría y el poder del Padre quien creó el universo según la voluntad del Padre expresado por medio del Administrador, el Señor Cristo Jesús.

El Señor Jesús vino para llevarnos al Padre. Él es el camino al Padre. El Señor Jesús es el Novio de la Iglesia así como también es el Hijo amado del Padre.El Señor Jesús es el Cordero de Dios quien murió como sacrificio por nuestros pecados.Le place al Padre que todo el mundo se convierta en la testimonio del Hijo. El Hijo se volverá el Centro y el Círculo de todas las cosas.Le place al Padre además que los santos sean la plenitud del Hijo. El Padre ama a los santos como ama al Hijo.

El Hijo es el Rey. Su cetro es la justicia. Él es la Persona Fiel que viene del Padre. Le ha sido otorgado al Hijo que gobierne, que administre todas las riquezas del Reino. Aunque el Hijo compartirá el Reino con los santos convirtiéndolos en coherederos, de todos modos, la voluntad del Padre siempre se expresa por medio del Hijo, por medio del Verbo viviente. El Espíritu santo siempre se mueve según la voluntad del Padre manifestado por el Hijo. Esta es la razón por la que está escrito que todas las cosas fueron creadas por él, es decir, por el Hijo.El Rey fue enviado al mundo y luego fue crucificado por nuestros pecados. Ahora el Rey, el Administrador y Juez Divino, ha regresado al Padre.

El Espíritu Santo ha sido enviado al mundo para llevarnos al Rey. El Espíritu Santo es como Eliezer quien fue enviado por Abraham para conquistar una esposa para Isaac, para el hijo. El espíritu Santo queda en la tierra como administrador de los recursos del reino. El Espíritu Santo siempre habla sobre el Hijo y glorifica al Hijo. Élֹ es fiel efectuando Su representación.  Ahora tú eres el carruaje de Dios. Ahora tú fluyes con el flujo de la Trinidad. Todas las cosas de Dios son las promesas de su palabra.

No hay lugar en el Reino para una voluntad que no sea la del Padre. No hay lugar en el Reino para un Rey que no sea el Señor Cristo Jesús. No hay lugar en el Reino para sabiduría y poder que no sea la que procede del Espíritu de Dios. El espíritu Santo es la persona que te consuela, que te guía a la dirección del Señor y la voluntad del padre. Son uno, con tareas diferentes para cumplir un mismo propósito; La salvación y la manifestación del Reino de Dios en la tierra; liberar a los cautivos, ¡conocer los misterios y tesoros del reino! En: Juan 14:16-17; Esta revelado: “Y yo rogaré al Padre, y El os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre; (es decir,) el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque ni le ve ni le conoce, (pero) vosotros sí le conocéis porque mora con vosotros y estará en vosotros.

En Juan, 16:7, Esta otra muestra de las muchas promesas que ya han sido establecidas: “Pero yo os digo la verdad: os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, el Consolador no vendrá a vosotros; pero si me voy, os lo enviaré”. En Romanos, 8:16 Notamos que el espíritu Santo es también nuestro abogado.”El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.             

                                   "El espíritu santo es nuestro ayudador, es quien nos hace sensibles."

En Romanos,  8:26, El espíritu santo es nuestro ayudador, es quien nos hace sensibles.”Y de la misma manera, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; porque no sabemos orar como debiéramos, pero el Espíritu mismo intercede (por nosotros) con gemidos indecibles;” El espíritu Santo nos dirige hasta en el momento que vamos a orar al padre, nos ayuda a pedir en forma correcta para que sean escuchadas nuestras oraciones, ese es otro poderos recurso que Él nos presta.  

En Juan 14.26,  El espíritu santo nos mantiene en convencimiento de la voluntad del señor para nuestras vidas.“Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, El os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho”. Él espíritu trae a memoria todo aquello que olvidamos, y nos trae convicción de pecado cuando estamos actuando de forma incorrecta. Él nos corrige.

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