¿Y El Día de Mañana, Qué Será de Mí? Como Hacer frente A La Incertidumbre

¿Que será de ti el día de mañana?… Si estás leyendo este artículo, es obvio o al menos muy probable que las cosas no estén saliendo muy bien, o estés pasando por momentos muy duros o críticos en tu vida.

El tener interés en un artículo con este título, dice mucho de la posible incertidumbre a la que al igual que muchos te estés enfrentando respecto a el día de mañana, o quizás no tengas tanta incertidumbre y tengas una idea de lo que va a pasar mañana, pero no te guste el panorama, quiero que sepas que cualquiera sea el caso, estás leyendo en el lugar apropiado.

Nada ocurre en esta vida por casualidad, Dios tiene un propósito con cada cosa que ha pasado en tu vida y lo tendrá con lo que pasará.

Sin rumbo ni destino hacia el mañana.

Quizás sientes que perdiste el rumbo porque perdiste un empleo, una pareja, o algún ser querido o  puede que hicieses una mala inversión y perdieses mucho dinero, y ahora te encuentras en la banca rota, de cualquier manera, debes de entender que por difíciles que sean las circunstancias que estás viviendo no es el final y aun vale la pena luchar.

No eres el único, que se ha sentido sin rumbo ni destino, sin saber que le espera el día de mañana, por lo general todos tenemos planes ya sea que los anotemos o no, tenemos expectativas y metas a corto, mediano o largo plazo, y cuando las cosas no salen bien tendemos a olvidar el lado bueno de todo y a hundirnos en pensamientos de depresión, derrota y fracaso.

La razón de toda esa frustración es que esperamos algo de la vida, y nos vemos a nosotros mismos como dueños de lo que nos deparara el destino.

Como seres humanos normalmente tendemos a querer tener el control de todas las circunstancias que nos rodean; sin embargo la realidad nos alcanza, y nos obliga a reconocer el hecho de que son muchas las cosas que escapan totalmente de nuestro control, y es en ese momento en el que aparece ese terrible pensamiento.

¿Y el día de mañana, qué será de mí?

Son en esos momentos, en los cuales lo mejor que podemos hacer no es lamentarnos por todo aquello que no ha salido bien, sino mirar hacia el futuro con esperanza.

Todo lo que ha salido mal nos deja algún aprendizaje, no es tiempo perdido el que has dedicado a un proyecto fallido, si en el proceso has aprendido; por el contrario,  son los escalones de tus errores, los que te llevaran a proceder con mayor cautela y asertividad hacia otro nivel más alto en el futuro.

No vivas de tus errores aprende de ellos y supéralos, la única forma en que los errores pasados pueden hacerte daño es que te aferres a ellos. Debes aprender a dejar ir lo que no te ayuda a crecer.

No importa si ya no esperas nada de la vida, sino que la vida espera algo de ti.

Es natural que a veces las circunstancias nos hagan sentir sin rumbo ni destino, pero debes entender que la única manera de permanecer en esa condición es que tú lo decidas así.

Mientras vivas siempre tendrás opciones y debes entender que lo que será de ti mañana depende exclusivamente de ti y de Dios, y Dios siempre quiere bendecirte ayudarte y prosperarte, en cuanto a Él respecta siempre quiere que tu vida cambie para mejor.

¿Qué dice Dios sobre tu futuro?

Posiblemente al igual que tú, todos en algún momento de nuestras vidas, nos hemos sentido frustrados, desalentados e inadecuados, y debes saber que en esos momentos es cuando es más importante buscar refugio en Dios y en su palabra.

 La Biblia dice: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová (Dios), pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.” Jeremías 29:11

Es bueno que sepas que estas palabras las dice Dios a tu vida hoy de la misma manera que las decía a Israel en la antigüedad.

Así como Dios estaba mostrando su buena voluntad para con aquel pueblo con esas palabras, pueblo que se había equivocado en reiteradas ocasiones siendo rebelde, desobediente e idolatra y que por buenas razones había sido castigado, así también Dios muestra su amor y paciencia para con nosotros como un Dios amoroso a pesar de nuestros desaciertos y errores.

Aunque el día de mañana no tengas claro lo que la vida tiene para ti, Dios tiene pensamientos de paz y no de mal respecto a tu futuro, Dios quiere lo mejor para tu vida, Dios está trabajando en medio de las circunstancias y quiere darte el fin que esperas.

Es en sus manos un fin dichoso, y puedes confiar en que Él sabe lo que está haciendo… y lo mejor que podemos hacer nosotros es adecuarnos a sus planes que con toda seguridad son mejores que los nuestros.

Concéntrate en vivir un día a la vez.

Jesús mientras estuvo caminando entre nosotros dijo durante el famoso sermón del monte las siguientes palabras:

Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Mateo 6:34.

Cada día trae su propio problema, es importante entender que por mucho que te afanes por el mañana, solo llegara mañana, no sirve de mucho vivir ansioso por el futuro.

Si confiamos en Dios no deberíamos preocuparnos en exceso por lo que será de nuestras vidas, es verdad que debemos planificar y organizar nuestra existencia, pero también debemos darle cabida al creador del universo en ella.

Orar a Él, primeramente para poner todos esos planes en sus manos, y para que si fuere su voluntad sean realizados y si no, podamos sobreponernos al no consumarlos, siendo agradecidos por lo que hemos podido lograr y por la oportunidad de vivir y equivocarnos.

Debemos estar conscientes, de que mucho de lo que No ocurre en nuestras vidas realmente no nos convenía que pasara, verdaderamente tenemos que aprender a ser agradecidos hoy por lo que tenemos y lo que no, si queremos ver la benevolencia de Dios mañana, y cuidar la forma en que pensamos y nos expresamos respecto al mañana.

Configurar tu mente adecuadamente.

La Biblia dice: “Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón porque de él mana la vida”

Proverbios 4:23.

Salomón quien fuera el hombre más sabio del mundo, es quien fue inspirado por Dios para escribir el libro de proverbios y es notable que en el dice: “Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón” la palabra corazón en este pasaje se refiere al centro de nuestras emociones y pensamientos, es decir a nuestra mente.

Lo que Salomón quiere decir en este versículo, es que lo que nosotros permitimos que entre en nuestra mente va a tener un tremendo efecto en nuestra vida.

La forma en que nosotros pensamos configura todas nuestras acciones y en consecuencia nuestra manera de vivir, el pasaje da por sentado que de lo que pensamos se construyen nuestra realidad inmediata, es por eso que es tan importante vigilar nuestros pensamientos.

No podemos tener un buen futuro el día de mañana si pensamos constantemente en que algo nos saldrá mal, si antes de realizar algo ya piensas que no lo lograras, o que vas a fracasar, estas configurando tu realidad para no lograrlo.

Es por eso que la pregunta que deberías tener en mente respecto a tu futuro es ¿Y el día de mañana, que quiero ser? Y en función de lo que quieres ser, actuar hoy, planificar el mañana confiando en que Dios, quien tiene el control absoluto del universo, está interesado en verte feliz en ese mañana.